En la calle me encontré con Dios
TESTIMONIOS INSPIRADORES
Oremos Juntos
2/10/20251 min read
"Era una mañana cualquiera. La ciudad vibraba con su rutina, la gente pasaba apresurada, sin mirar más allá de sus propios pensamientos. Pero yo, que caminaba sin rumbo fijo, sentí un abrazo cálido en la mirada de un extraño. En ese instante, me di cuenta de que Dios se encontraba en lo más cotidiano, en la mirada silenciosa de alguien que no esperaba, pero que necesitaba ser visto."
A veces, buscamos a Dios en los lugares más altos o en momentos solemnes. Pero la verdad es que Dios se encuentra en lo sencillo, en los rostros que cruzamos, en los gestos que damos y recibimos. Esta experiencia en la calle me recordó que, muchas veces, el encuentro con lo divino no llega como esperamos, sino en lo inesperado, en lo más humano.
Y fíjate en este texto:
“Cuando lo hiciste a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí me lo hiciste.”
Mateo 25,40
Aquí te dejo este desafío espiritual:
Hoy, busca a Dios en lo cotidiano. Haz un acto de bondad, por pequeño que sea, hacia un extraño o una persona que cruza tu camino. Reflexiona sobre cómo ese gesto, aunque imperceptible, puede ser un encuentro con lo divino.
Bendición
Que tus ojos se abran para ver a Dios en cada encuentro diario. Que, al mirar al otro, puedas encontrar la presencia divina que te invita a amar. Amén.

