La importancia de la misericordia para empezar con fuerza en un nuevo año

“La puerta de la iglesia se cerró suavemente detrás de mí. Había llegado en silencio, buscando paz para un año lleno de incertidumbres. Mientras me sentaba en el banco, sentí una sensación extraña, como si algo estuviera bloqueando mi paz. Recordé las palabras de Jesús: “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia” (Mateo 5,7). En ese momento comprendí que la misericordia es la clave para empezar con fuerza, dejar atrás lo que nos pesa y abrazar la gracia de Dios para un nuevo comienzo.”

La misericordia no solo es una virtud que recibimos, sino que también debemos practicarla. Comenzar un nuevo ciclo con un corazón lleno de misericordia nos permite liberarnos de las cargas emocionales y espirituales del pasado. La misericordia sana nuestras heridas, nos permite soltar rencores y nos conecta con la divinidad. Al perdonar y ser perdonados, abrimos el espacio para la renovación espiritual y el verdadero crecimiento. La misericordia, entonces, no es solo un acto hacia los demás, sino una actitud interior que nos da fuerza para seguir adelante con propósito.

Déjate tocar por esta invitación:

“Sean misericordiosos, como también su Padre es misericordioso.”
Lucas 6,36

¿Quieres llevarlo a la práctica?

Hoy, realiza un gesto de misericordia. Perdona a alguien que aún lleves en tu corazón, ya sea en tu mente o en tu alma. Si no es posible un perdón directo, hazlo en tu oración y confía que el acto de soltar te traerá paz. También puedes hacer una pequeña acción de bondad hacia alguien que te haya herido o con quien tengas un conflicto. Este gesto será como un acto simbólico de liberación.

Bendición

Que la misericordia de Dios te rodee y te fortalezca en este nuevo ciclo. Que al extender tu misericordia, encuentres la paz que sólo el perdón puede traer. Que tu corazón sea renovado con cada acto de compasión. Amén.

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